Las plantas infectadas presentan pequeñas protuberancias o agallas de color verde claro, en rama y ramillas, que posteriormente aumentan de tamaño y adquieren una coloración oscura; el pedicelo de los frutos también puede infectarse, necrosarse y provocar la caída prematura de frutos; y ocasionalmente infectar hojas y raíces.
La literatura informa que la calidad del aceite también, se afecta adquiriendo un sabor amargo, rancio, desagradable.